Uno de los primeros pasos para construir una cultura organizacional es crear una visión.
Crea tu visión, compártela y síguela apasionadamente, con todo tu equipo.
La visión es la imagen a largo plazo, que puede y debe lograrse.
Tu meta final, tu propósito o principal objetivo.
Si la compartes de manera que los demás puedan percibirla igual que tú, el compromiso de tu equipo automáticamente se expande y se llena de entusiasmo.
La visión es más que un sueño, un conjunto de esperanzas, que compromete y motiva día a día cada integrante para cumplirla.