La biotecnología no es una disciplina nueva, pero avanza a pasos agigantados y cada vez tiene más aplicaciones en nuestro día a día: desde el desarrollo farmacéutico a la producción alimentaria o el tratamiento de residuos contaminantes.
Hoy, las cinco ramas en las que se divide la biotecnología moderna —humana, ambiental, industrial, animal y vegetal— nos ayudan a combatir el hambre y las enfermedades, producir de forma más segura, limpia y eficiente, reducir nuestra huella ecológica y ahorrar energía. Todo ello ha entusiasmado a mercados bursátiles como Wall Street, donde la biotecnología fue uno de los sectores más rentables del índice NASDAQ Composite en 2019.
Una empresa innovadora en biotecnología puede definirse como una unidad de negocio que logra traducir los avances científicos y tecnológicos usando organismos vivos o sus partes para la elaboración de nuevos productos, procesos y/o servicios especializados, los cuales deben estar debidamente protegidos por las Leyes de la Propiedad Intelectual.
Su comercialización es benéfica para la sociedad, además de ser económicamente redituable y contribuir a la solución de una problemática específica en las ciencias de la vida.
En México tenemos varios casos de empresas biotecnológicas innovadoras a saber:
Grupo Silanes: Empresa dedicada a varias áreas terapéuticas: diabetes, cardiovascular, gastroenterología, sistema nervioso central, ginecología y anti venenos. Con presencia en 15 países, sus desarrollos han sido producto de años de investigación y/o asociación con grupos de investigación mexicanos y extranjeros de quienes han licenciado sus patentes.
Probiomed: Empresa líder en materia de fabricación de productos farmacéuticos genéricos o biocomparables de síntesis química como anticuerpos, vacunas recombinantes, citosinas y muchos otros enfocados al tratamiento de enfermedades crónico degenerativas. Esta empresa se ha distinguido por ser una de las que más invierte en Investigación y Desarrollo.
GreenCorp: Esta empresa 100% mexicana ha revolucionado la agricultura en nuestro país y también en muchos otros países, sobre todo del continente americano en el área de biocontrol. Es decir, el control biológico de plagas y enfermedades de los cultivos evitando el uso de los agroquímicos; y también el desarrollo de biofertilizantes, bioestimulantes y biocoadyuvantes. La empresa ha logrado posicionarse gracias a las inversiones que ha realizado para caracterizar los compuestos bio activos en una gran cantidad de plantas y hierbas originarias de México. Ha sido galardonada con el Premio Nacional de Tecnología e Innovación en dos ocasiones.